Mientras haya esperanza
(A Xosé Lois Vila)
Cuán triste y sola se queda tu voz.
Cuánta vida dormida en tus manos,
aguardando
a que otras manos despierten las tuyas.
Y en la noche una voz,
retumbando,
las libere del sueño fatal.
Cuántas veces tus sueños guiaban
las palabras de un tiempo mejor.
Golondrinas que lejos,
volando,
llevasen con ellas tu yo.
Cuán lejanas se quedan las penas
que guardabas con tanto fervor.
Esperando
la mano, que abierta,
se llevase con ella el dolor.
Cuántas noches tu alma
luchando,
alejaba de ti el temor…
Esperanzas que brotan al alba,
recordando,
que nada se acaba…
mientras haya una mano al final.
Manoel Xosé
3 comentarios:
Buen poema a la esperanza, aunque sea una utopía, ya que la esperanza es una ilusión que la verdad devanecía. Ceneme
Tu poema me ha hecho sentir emociones diversas, reacciones naturales cuando se logra transmitir el sentimiento noble de la amistad y el afecto. Me recuerdas en este poema a otro gran poeta, romántico y sensible, a Becker. Tu poema se hace voz entre tus versos, y se hace sueño y esperanza. Hermoso, muy hermoso tu poema... y tierno y humano.
Es un poema triste y a la vez esperanzador, porque es cierto que "nada se acaba mientras haya una mano al final" llena de afecto para sanar las penas; aunque "al final" suene rotundo,esa mano mantendrá la esperanza viva.
Extremecedor poema.
Un saludo
Teresa
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" Piensa si lo que vas a decir es más hermoso que el silencio"