Muriendo está la noche blanca.
Muriendo está la noche blanca
en mi cansado pensamiento,
entre las flores margaritas
de mis jardines soñolientos.
Y los pajarillos componen
sus melodías cristalinas,
en el jardín puro, fresco,
entre las almas escondidas.
El brillante sol desde su ara
y su trono blanco de cielo
acompaña la madrugada,
la madrugada del sol bueno.
La noche queda agonizando
mientras su seno de color
muere durmiendo en la tierra
dejando sólo el olor.
La gaviota queda llorando
solitaria en un rincón,
mientras que dentro la pena
desgarra su corazón.
Jean Carballo
(Grupo Poético Brétema)
6 comentarios:
Jean : ¡ Qué bello sueño final de la noche ! al que acompañas desde tus "jardínes " con la presencia de luces y melodías sumadas para despedir la noche que deja aroma. Gracias con mi afecto María Palacios
Preciosa poesia, pero hay que pensar que la noche es solo parte de esas 24 horas, en las cuales el amor y los sentimientos por todo aquello que nos rodea es lo que verdadera importa. saludos de Gloria y Magali
Hola Jean: Un poema muy tierno y de una realeza
impresionante, donde la gaviota es realmente la
protagonista.
Un cordial y afectuoso saludo de Félix Loira
El primer y tercer "cuarteto" es insuperable y digno del máximo galardón.
El final es tan entrañable que al más insensible se le hiela el corazón.
Mi admiración a tu sentir poético.
Castro.
Delicado y sensible tema poético. Enhorabuena. Ceneme
En la realidad que vemos, María, ya hay una fuerza poética capaz de llenar hojas y hojas de escritura. Por eso admiro lo que tú escribes: en un instante no importa el paso del tiempo, sólo lo que hay ante tus ojos, lo que puedes sentir y tú. Y es que la misma vida te enseña, sólo tienes que escucharla.
Así es, Magali, la noche es el escenario idóneo, pues te reencuentras contigo mismo, pero a través de ella puedes dejar fluir todo aquello que te identifica.
Un abrazo, Félix. Efectivamente la gaviota es quien le da cuerpo y colorido.
Castro, entiendo que te has fijado en algo más que la imagen: en la estructura... y te lo agradezco. No pensaba en la estructura cuando dejaba brotar las palabras de mi mente: sólo una expresión sencilla y clara a la vez.
Como siempre, gracias Ceneme. A ver si para el próximo curso aparezco más por las reuniones, será sólo cuestión de ordenarme un poco
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