AMIGAS
Entre piel y piel
esculpidas en os
pliegues
y los surcos del
tiempo
no necesitamos
lágrimas
paladeamos la sal
de la herida.
Solo los brazos en
su cierre
de costuras saben
a duelo,
ante los hombros
del silencio
enmudecen las
palabras.
Nos reconocemos en
los descarnados
compartimentos
donde se
descompone el grito.
Entre Safo y la
luna
se agita nuestro
mar de emociones.
Nuestras riberas
maltratadas
fueron el asilo de
tantos
piélagos
tempestuosos.
Somos los mismos
ojos
en las otras
miradas lastimadas
los mismos
vientres donde
se detiene el
latido.
Cuando apuramos el
vuelo
llevamos en las
alas el empuje
del viento amigo
de rostro
inconfundible.
Cuando el tiempo
se sublima,
de otoños entre
níveos cabellos
y nevadas cejas
las trémulas
manos, sostienen
mezquinas
soledades.
Si se rompen
nuestros lazos,
se detiene la
vida.
Cuando la ceniza y
la tierra
devastada nos
alcancen
sobrevivirán a
nuestro epitafio.
Julia Álvarez González
Grupo Poético Brétema
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" Piensa si lo que vas a decir es más hermoso que el silencio"