A NUESTRO ALREDEDOR LA VIDA
Cielo azul y
campos verdes,
la mar con esos
dos colores
y el embrujo de
los atardeceres
en el valle donde
aún viven los amores.
Al atardecer las
entrañables estrellas,
cuando la luz se
vuelve penumbra
y todos
contemplando la más bella
sin olvidarse del
embrujo de la luna.
¡Qué grandes,
descubrir el universo!
Un juego perenne
de luz y oscuridad,
la magia de
contemplar desde lejos,
lo que todos
soñamos tener y alcanzar.
¡Gran árbol de la
perenne juventud
que altivo te
alzas más allá del cielo,
como el ave fénix
del embrujo de la luz
que nace cada día
en los tiempos!
¡Mágico duende de
la flor de la vida,
atrapado en el
iris del lago del futuro,
como la pureza del
grano de la semilla
que en la
superficie de la tierra germina!
¡Cielo de múltiples y entrañables sensaciones
en el espejo donde
se reflejan los humanos,
en ese vergel de
campos multicolores
donde la vida es
fuente de esclavos!
¡Qué caro cuesta
sonreír sin ganas!
Cuando la sonrisa
tiene un alto precio,
mientras se vive
atado al desprecio
cargando con esa
cruz a las espaldas.
Amante Romero Álvarez
Grupo Poético Brétema
1 comentario:
Cierro los ojos y retorno por unos segundos a Vigo, ese lugar entrañable que me sigue abrazando en la distancia. Amante, gracias por este bello poema, realizas un recorrido temporal de magia con una cuota sutil de realidad. Un abrazo.
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" Piensa si lo que vas a decir es más hermoso que el silencio"