EL AGUA ES VIDA
El agua suena en el arroyo
Con su dulce son deleita montes y valles,
relaja las penas contemplando las cumbres
cubiertas de flores y soledades.
¡Ingenio fue crear tanta belleza!
Es como una ventana inmensamente abierta
Corriente abajo sin mirar atrás
Sin prisa, lánguida, constante, con vida…
En los océanos, respetada, fuerte, soberbia
como un enamorado, es imprevisible,
con su furor riza su cuerpo, es gallarda y poderosa
Serena, fascinante como una bella mujer
En las tardes de verano nos refresca
Por las mañanas su contacto nos despeja
Para el sediento el más preciado tesoro,
deleitando gota a gota su garganta
En invierno en forma de lluvia,
cayendo como lágrimas en los cristales
Y como un péndulo al compás traspasa el alma
que muy suavemente descansa
¡Agua maravillosa! ¡Agua divina!
¡Mojas, refrescas y das vida
con tu breve gozo de frescura!
¡Quién rechazaría una sóla gota de agua!
María Teresa Cariño Davila
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