EL OCASO
Qué triste es llegar a viejo,
exclamaba un pobre anciano,
nadie te tiende su mano
ni escucha tu consejo.
Veo arrugar mi pellejo
siento que tiemblan mis manos,
piensa que somos hermanos
y mírate en este espejo.
Aunque no quieres consejos
de un hombre de pelo cano,
piensa, que hace algún verano
era como tú, moreno,
era fuerte y era sano,
piensa que en algún verano
tú también serás un viejo.
Eso, para ti está lejos,
piensas que aún es temprano
y que has de decir, te amo,
a cambio de algunos besos.
Si de algún dolor me quejo,
me dicen, que son los años
más que el dolor, hace daño
te digan: ¡Eres un viejo!
Ahora que yo me alejo
pienso que todo fue en vano,
ya no me ama quien amo,
qué cruel el mundo que dejo.
Escucha bien mi consejo,
sobre el corazón mi mano,
no desprecies a un anciano
que tu vejez no está lejos.
Telvi da Silva
2 comentarios:
PRECIOSA,tomamos nota,gracias telvi por tu poesia eres fantástica.Besos T.CARIÑO.
Un buen trabajo sobre la tercera edad. El insensato que menosprecia la vejez, a sus mayores, debería tomar buena nota del poema.
"Cuando las barbas de tu vecino veas cortar..."
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" Piensa si lo que vas a decir es más hermoso que el silencio"